MUSICOTERAPIA Y DOLOR CRÓNICO

Tratamiento de Musicoterapia para personas con dolor cónico

Trabajo en conjunto con terapia ocupacional en Centro de Rehabilitación-Nota InfoVeloz

Musicoterapia y manejo del dolor

La música llega a todas las áreas del cerebro e interviene en la percepción del dolor, gracias al efecto directo que ejerce en la capacidad de la corteza somatosensorial de recibir sensaciones de dolor.

Existen diversos estudios que señalan algunos usos de la música que dan como resultado la disminución de las respuestas visibles al dolor, la reducción de la sensación de dolor (también como efectos analgésicos de la música) y el descenso en la cantidad de anestésicos y analgésicos administrados durante y después de procedimientos hospitalarios, quirúrgicos, y obstétricos.

Se ha investigado que la respuesta neurofisiológica a un estímulo doloroso específico varía de acuerdo a la personalidad y el umbral del dolor de cada paciente; y concluyen que la ansiedad que se asocia a un evento doloroso produce sensaciones de estrés, temor y pánico, lo que intensifica la reacción del paciente al dolor.
Por lo tanto podemos decir que el empleo de la música (por un profesional especializado) durante la preparación quirúrgica o incluso luego de la intervención, trae grandes beneficios ya que reduce la ansiedad, el temor, rechazo a la anestesia, periodos de recuperación y de estancia en el hospital, etc.

A través de la Musicoterapia se consideran diversos aspectos que influyen en la experiencia del dolor:

  • La música logra quitar el foco de atención que esta puesto en el estímulo doloroso y dirigirlo hacia el estimulo musical. La música aquí funciona como distractor.
  • El dolor crónico se acompaña de trastornos emocionales, y es la música donde se facilita la expresividad y flexibilización de las mismas.
  • También se generan cambios en funciones cognitivas, que a través de la música se busca aportar un cambio en las diferentes funciones, por ejemplo la memoria episódica.
  • Se evidencian limitaciones en el sistema motor a partir de la cronicidad del dolor. Pero hacer música involucra nuestro cuerpo completamente, por lo que se ponen en juego complejas estructuras cerebrales y de nuestro cuerpo, desbloqueando rigidez en los movimientos.
  • Y por último se observan dificultades en las relaciones interpersonales, el aislamiento y reduce la comunicación. Por lo que el hacer música con otro (terapeuta o grupo de pares) favorece este eje.

Todos estos aspectos son abordados de forma conjunta, y lo importante a destacar que el objetivo principal es mejorar la calidad de vida del paciente, y que las estrategias que se generen en el contexto sonoro-musical logren reducir los síntomas y mejoren el afrontamiento de nuevas situaciones.

*Nota completa, haciendo click aquí Infoveloz.com

¿Querés saber más sobre Musicoterapia? Aquí te comparto 4 Beneficios de la Musicoterapia

Dejá un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *